viernes, 6 de marzo de 2015

La Devoción alcalaína en los Siglos XVII y XVIII ( IX)




La Virgen de los Santos 

     A pesar de que el culto a esta imagen se debe remontar al siglo XIV (la primera noticia documentada es de 1507), en el siglo XVII tan sólo hemos encontrado 6 menciones (8 % de las documentadas en este siglo), siendo 4 de testamentos masculinos y 2 de femeninos. Hay que tener en cuenta que el culto a esta imagen debió contar con más dificultades que otras al estar fuera del núcleo urbano. 

     Hay que destacar que estas menciones se encuentran muy espaciadas en el tiempo ya que 2 se producen en los dos primeros años del siglo y otras dos en el último lustro, cuando empieza a afianzarse el culto, como veremos en el siguiente siglo. 

     Por otro lado, también es reseñable que excepto una, todas hagan referencia exclusivamente a misas, como las que ordena en su testamento Francisco (apellido ilegible) el 3 de marzo de 1600: 

“02 yten dos misas a nra señora de los santos” 

Testamento de 1600 mencionando a la Virgen de los Santos

     Tampoco hemos hallado ninguna mención sobre la existencia de una cofradía, (por otras fuentes sabemos que no contará con hermandad propia hasta el último cuarto de siglo) pero sí una que nos habla de que se estaba trabajando en la ermita. Esta mención se halla en el testamento que el 24 de octubre de 1694 otorgó Lorenzo Sánchez ante el escribano Juan Barreto de Molina y en él se recoge:

 “mando para la obra de nuestra señora de los santos sinquenta Reales de limosna”

La relación de referencias documentadas en este siglo es la siguiente:

1600 – Juan ¿González?
1602 – Marina de Pina
1634 – Alonso Valderas
1659 – Catalina ¿?
1694 – Lorenzo Sánchez
1695 – Juan Meléndez

M – 2 misas
M – 2 misas
M – 9 misas
M – 4 misas
D – 50 reales para obra
M – 3 misas


     Con la llegada del nuevo siglo, impulsado por la naciente cofradía, el culto a la Virgen de los Santos se dispara, o al menos eso nos hace pensar las referencias en los testamentos, puesto que de 6 menciones en el siglo pasado pasamos a nada menos que 71 en el siglo XVIII, lo que supone que el 24,91 % del total registradas en dicha centuria, o lo que es lo mismo, la Virgen de los Santos está presente en uno de cada cuatro testamentos. 

     También comprobamos que se mantiene la misma tónica que en siglo anterior en cuanto a que la Virgen es mencionada el doble de veces en testamentos masculinos que en los femeninos. 

     Otro aspecto destacable que revelan los datos, es la existencia documentada de la cofradía en todas las décadas excepto en las de 1760, 70 y 80, lo que no quiere decir que no existiera. 

La Virgen en un exvoto del Santuario

     Con respecto a las mandas, nos encontramos 27 mandamientos de misas, que eran costeadas generalmente con 4 reales. De éstas, 2 son misas perpetuas a celebrar anualmente. 

     Los donativos y limosnas son otro de los puntos quizá más importantes para revelarnos hasta qué punto crece el culto a la Virgen de los Santos. Aparecen recogidas 18 donaciones en metálico, sumando la cantidad de 1341 reales, 100 ducados y 148 escudos. (No se incluyen aquí las donaciones en metálico para pagar las misas). 

     Gracias a estos testamentos sabemos también que los clérigos alcalaínos guardaban mucha devoción a la patrona, 9 de los cuales dejan donaciones a la misma. En la partida de funeral del beneficiado Francisco Recio y Palma consta que hizo testamento ante el escribano Miguel Nicolás de Silva el 3 de junio de 1770 y en él mandó “se le diese a Nuestra Sra de los Stos. de esta villa mil reales para aiuda al camarin que se le esta asiendo” 

Testamento de 1770 con el donativo para la obra del Camarín de la Virgen de los Santos

     Además, aparecen también muchos familiares de clérigos dejando limosnas, como Fernando Cortegana Bañales quien en su testamento otorgado el 30 de junio de 1764 ante el escribano Francisco Manuel García deja ordenado lo siguiente: “a la Ymagen de Nra. Sra. de los Santos para cuidar su culto cien pesos de a quince rs vn” 

     Entre los mandamientos empieza a proliferar la donación de animales a la Virgen, encontrándonos con 12 vacas, 3 toros, 5 bueyes, 1 eral (res vacuna entre uno y dos años), 1 añojo (becerro de un año), 2 potros y un caballo. Este caballo es donado por el beneficiado de la Parroquia Pedro Collado Cortegana para el servicio de la ermita, según consta en su testamento otorgado ante Carlos Del Fierro el 9 de mayo de 1706. 

    Asimismo, se recogen 10 menciones por donación de trigo, que totalizan 8,5 fanegas más ½ cahíz. Hay que reseñar que en dos de las referencias no se especifica cantidad sino que se ordena se pese a un hijo o hija y se de el peso a la cofradía. Así ocurre en el testamento de Juan Morán de fecha de 25 de noviembre de 1709: “Mando se hiciese pesar a trigo A maria de alcala su hija y lo que pesase se le diera de limosna a la cofradia De nuestra Sra de los Santos de esta villa para aiuda a la q hubiere necesidad por aver mucho días que lo tenia asi prometido” 

     Aparecen además otras 9 menciones con donaciones diversas como 1 arroba y 3,5 libras de cera, 4 candelabros de plata, una colcha de damasco con galón de oro, 4 anillos con esmeraldas y una pulsera de perlas. A esto habría que añadir la donación que hace Diego Cortegana Bañales el 2 de junio de 1740: “Declaro que yo y Dª Ysabel de Cabrera mi mujer tenemos ofresido hazer unas Andittas pequeñas de plata para el tavernaculo de nuestra señora de los Santos sitta en el termino de estta villa con que se pide por las calles que ha de ser de madera cubierttas de plata. Mando que mis Albaseas ajusten y paguen las dhas Andittas y los entreguen a dha hermita y al maiordomo”.

La Virgen de la capilla de la Salada
(foto Carmen Arias)

     Existe otra referencia, encontrada en los libros de funerales, en las que se recoge que en su testamento otorgado ante el escribano Francisco Marchante el 26 de mayo de 1751, María Sevillana ordenó “que sus herederos comprasen unos ojos de plata a la virgen de los Stos.”. (13) Desconocemos a qué se refiere este donativo.

Testamento de 1751 con  singular donativo

     Las referencias del siglo XVIII son las que siguen (marcadas con * las precedentes de los libros de funerales):

1701 - Diego Martin Torreblanca
1704 – Domingo Blanco
1706 – Pedro Rufo Ahumada y Morejón
1709 – Bernarda Terán
1710 – Juan Morán
1711 – Diego Alonso Moreno
1717 – Diego Jiménez de Zurita (clérigo)*
1722 – Juan Benítez*
1722 – Cristóbal de Ortega Cárdenos*
1724 – Manuel Álvarez
1725 – Pedro Collado Cortegana (benef.) *
1725 – Juan Narváez*
1725 – Francisco Coronado*
1725 – Isabel Pantoja*
1726 – Domingo Marín Alfaro (presbítero) *
1727 – Blas Fernández*
1727 – Francisco José Perales*
1727 – Alonso de Araña*
1727 – Jorge García Mateos Mariscal*
1727 – Diego Morillo Bañales (benef.) *
1728 – Pedro Costilla*
1728 – Pedro Morillo Bañales*
1728 – Tomasa María Ruiz de Tejada*
1729 – Juana Moreno Gutiérrez*
1729 – María de la Rosa*
1729 – Domingo de Campos*
1729 – Alonso Miguel Chacón (presbítero) *
1730 – Jacinta María
1731 – Pedro Hidalgo
1731 – Domingo Millán*
1732 – Isabel López*
1733 – Pedro Morillo de Cote*
1732 – Fernando Gómez Tutor
1732 – Alonso Ronquillo Cárdeno
1733 – Francisco Felipe
1733 – Josefa María de Medina
1733 – Sebastián Muñoz
1734 - Jacinto Marcos de Fuentes*
1734 – Alejandro González*
1735 – María Pérez Moreno
1735 – Juan Palacios
1736 – Juan Camacho
1736 – María Morillo Bañales*
1737 – Juan Gómez Correa (presbítero) *
1737 – Alonso Cabello Chacón*
1737 – José Coronado
1737 – José Pérez Naranjo
1738 – Pedro Jiménez Marrufo*
1740 – Francisca Ramírez*
1740 – Diego Cortegana Bañales*
1741 – Gaspar García Silleros*
1745 – Isabel de Espino*
1746 – Lucia Ana Morillo Bañales*
1749 – María Fabiana de la Conseja
1749 – Sebastián de Uranda Flores
1749 – María de los Santos Olivera*
1750 – Manuel Gracia
1750 – Domingo Carlos Fidusa
1750 – Blas Pérez
1751 – María Sevillana*
1755 – Diego Manzano y Ortega*
1755 – Mateo Sánchez Godoy*
1764 – Fernando Cortegana Bañales*
1764 – Juana Vidal*
1766 – Fco. Manzano y Ortega (presb) *
1770 – Francisco Recio y Palma (benf.) *
1788 – Antonia García
1789 – María González
1792 – Félix Manrique (Beneficiado)
1794 – Sebastián Quijada
1795 – Francisco del Pozo
M -1 misa perpetua anual
D - 20 reales
D - 12 vacas
D - 1 arroba ¿cera? a cofradía.
D - Peso hija en trigo a cofradía.
D - Peso hijo en trigo a cofradía.
D - 12 reales a cofradía.
D - 10 ducados a cofradía.
D - 20 pesos escudos a cofradía.
D - 15 reales a cofradía.
D - 1 caballo
D - 30 reales a cofradía.
D – 1 toro
M – 1 misa
M – 1 misa
D – ½ cahiz de trigo a cofradía.
D – 15 reales a cofradía.
D – 8 reales para 2 misas
D – ½ fanega de trigo
D – 2 toros a cofradía.
M -1 misa
D – 3 bueyes
D - 4 reales para 1 misa
D - 8 reales para2 misas + velo tafetán
D – 8 reales
D – 1 fanega trigo a cofradía.
D – 1 eral a cofradía.
D - 4 reales para misa
D - 15 reales a cofradía.
D – 4 reales para 1 misa
D – 1 fanega trigo y 2 misas
D – 1 potro a cofradía
D - 200 reales a cofradía.
D - 1 toro
D - 1 misa
D - 1 misa
D – 12 para misa+ 4 reales de plata a cofradía
D – 2 fanegas trigo
D – 12 para 1 misa + ½ libra cera a cofradía
M - 1 misa
D - (ilegible)
D - 8 reales para 2 misas
D – limosna ¿? a cofradía.
D – 2 candelabros de plata a cofradía.
D – 2 bueyes
D - 1 libra cera
D - 4 reales para 2 misas
D – 1 colcha damasco + 2 candelabros a cofradía.
D – 1 fanega trigo a cofradía.
D - andas plata, 1 toro y 2 fan. trigo
M – 1 misa
D – 1 añojo a cofradía.
D – 4 anillos con esmeraldas y pulsera perlas
M - misa (13 reales en varios altares)
D - 12 reales
M – 1 misa
D - 4 reales para 1 misa
D - 4 reales para 1 misa
D - 1 potro a cofradía.
D - Unos ojos de plata
D – 90 ducados a cofradía.
D – 2 fanegas trigo
D – 100 pesos de 15 reales
D – 2 libras de cera
D – 20 pesos escudos
D – 1000 reales para obra camarín
M - 1 misa
M - 1 misa
D - 8 pesos a cofradía.
D - 10 reales para misa
M - 4 misas



Comparativa del culto de la Virgen del Rosario, de los Santos y Soledad

     Si comparamos en el siguiente gráfico la evolución a lo largo de los dos siglos de las referencias de las tres vírgenes estudiadas, podremos comprobar cómo en la primera década del siglo XVII el culto a la Virgen del Rosario prevalecía sobre los otros dos, mientras que en la segunda mitad se igualan. Sin embargo, destaca sobre manera el gran auge que sufre el culto a la Virgen de los Santos entre 1720 y 1750.
EVOLUCIÓN DEL NÚMERO DE MENCIONES 
DE LAS PRINCIPALES VÍRGENES EN AMBOS SIGLOS

      Este aumento no debe ser casual, sino que tiene que obedecer a algún motivo que moviera a los fieles. Es posible que sucediera algún hecho que el pueblo considerase milagroso, gracias a la intercesión de la virgen. No podemos olvidar que existe un documento fechado el 12 de diciembre de 1723 escrito por el escribano Carlos del Fierro en que se narra que padeciéndose una gran sequía aquel año, se iniciaron unas rogativas a la Virgen de los Santos. No se habían terminado cuando empezó a llover copiosamente, por lo que se suspendió el novenario. Pero de nuevo volvió la sequía, se retomaron las rogativas e incluso se sacó en procesión al cristo de la Viga. El día 21 de noviembre salió todo el pueblo para traer a la Virgen. 

“Y llegando la Santísima Imagen a la fuente de la Salada empezó a caer rocío con niebla que fue preciso acelerar el paso y llegando a la plaza de la Cruz donde estaba la comunidad de Nuestro Padre San Francisco de Paula con la Soberana Imagen de nuestro Padre Jesús Nazareno estando en la rogativa que se acostumbra a hacer en dicha plaza fue preciso poner el palio sobre las andas de la imagen de Nuestra Reina de los Santos porque se le mojaba el manto teniendo yo el escribano una de las varas del referido palio y habiéndose conducido a su Divina Majestad a dicha Parroquia se suspendió el rocío hasta el día siguiente que a la misma hora se nubló y empezó a llover algo más pero con lentitud y prosiguió toda la noche sin viento alguno y el día 23 de dicho mes se mantuvo entoldado hasta la misma hora que empezó a llover copiosamente y lo estuvo toda la noche con lentitud y sin aire y el día 24 amaneció con la misma llovizna y en esta forma estuvo todo el día y la noche muy caliente y en calma y el día 25 amaneció toldado y con niebla y al medio día salió el sol y se tuvo toda la tarde con bochorno y la noche se tuvo serena y estrellada y amaneció el día 26 con sol y prosiguió lo siguiente…… el domingo próximo 5 de este mes se condujo la soberana imagen de María Santísima de los Santos al referido su santuario con general desconsuelo por no haber llovido con abundancia y el día 10 siguiente al que se cumplió el segundo novenario empezó a llover con tanta abundancia que se han llenado los ríos y prosiguió el siguiente día 11 de noche y de día sin cesar y hoy día de la fecha domingo infraoctava de la Concepción en que se celebró en dicha Parroquia la fiesta de desagravios se cantó el Tedeum laudamos en hacimiento de gracias por la lluvia y para que conste y de que así pasó doy fe lo certifico como dicho es para mayor gloria y honra de María Santísima de los Santos en la villa de Alcalá de los Gazules en 12 días del mes de diciembre del año 1723 en testimonio de verdad.” (16) 

NOTAS

(13) Archivo Parroquial de Alcalá. Libro Funerales 5º. Partida de funeral de María Sevillana 4 de junio de 1751.

(14) Archivo Histórico Provincial de Cádiz. Protocolo de Alcalá de los Gazules nº 281. 

(15) Archivo Parroquial de Alcalá. Libro Funerales 5º. Pág. 180. Partida de funeral de Miguel Martín de Cote y de la Sida 10 de agosto de 1747 

(16) Ruiz Torres, domingo; “La Romería y el testimonio de un escribano”. Revista Apuntes Históricos 1985.

No hay comentarios:

Publicar un comentario